En los laboratorios de química, se utiliza la Solución Amortiguadora, conocida también como tampón o buffer, para mantener constante el PH en mezclas a las que se le han añadido ácidos o bases fuertes y así amortiguar los cambios producidos por estas adiciones, para asegurar el éxito de la reacción.
Una Solución Amortiguadora es acuosa y está formada por un ácido débil y una base conjugada, o en su defecto, una base débil con un ácido conjugado. Está preparada en agua, ya que esta es la única forma de hacer sentido a la escala de PH. Funciona con base en los principios de Le Chatelier del equilibrio del ácido-base y es así como logra amortiguar los cambios de PH en una mezcla.
El funcionamiento de la Solución Amortiguadora también dependerá de la temperatura a la que se encuentre al momento de ser añadida a una muestra. Adicionalmente, mientras más concentrada esté esta solución, mayor será su capacidad para amortiguar o regular el PH de una mezcla, la concentración total de la solución, debe ser mayor la concentración final del ácido o base fuerte que se añada.
Como mencionamos anteriormente, una Solución Amortiguadora está compuesta únicamente por una base y un ácido, que se mezclan hasta lograr el PH requerido. Para lograr esto, hay dos métodos más utilizados:
1- Preparando soluciones separadas de ácido débil y una sal de base conjugada, luego mezclar de a poco hasta lograr el PH que se necesita.
2- Preparar una solución de ácido débil que tenga la concentración total requerida, para luego ir agregando hidróxido de sodio o de potasio hasta lograr el PH deseado.
Independiente del método utilizado, existe una gran variedad de Soluciones Amortiguadoras, dependiendo todas ellas del tipo de componente que tengan o en su defecto, del PH final que se requiera para el ensayo.