La liofilización es un procedimiento con múltiples aplicaciones y por ende, una serie de condiciones potenciales, las que influyen en el tiempo que toma realizar el procedimiento completo. Para la mayoría de las muestras, esto puede tomar entre 24 y 48 horas, aunque existen excepciones para esto.
A continuación, dejamos los principales factores que influyen en el tiempo que toma liofilizar una muestra en el laboratorio:
1- Tipo de muestra.
El punto de congelación de cada muestra, además de su contenido de sales, azúcares y disolventes, influyen en el tiempo que se requiere para la liofilización. Si el punto de congelación es muy bajo o la muestra es susceptible a fundirse, requerirá de un mayor tiempo en el proceso.
2- Tamaño de la muestra.
Mientras mayor sea el tamaño de la muestra, más tiempo llevará realizar la liofilización.
3- Matraz.
El tamaño del matraz debe ser el correcto y llenarse sólo hasta un tercio de su capacidad.
4- Proceso de congelado.
El pre-congelado debe realizarse a la velocidad correcta, para evitar la formación de cristales de hielo sobre la muestra, los que alargan el proceso del liofilizado.
5- Liofilizador.
El equipo de liofilización correcto posee temperaturas más bajas que el punto de congelación de las muestras, además de sistemas de carga más eficientes, lo que ayuda a mejorar los tiempos de procesamiento.