Definitivamente la pandemia del Coronavirus ha levantado una ola de fake news y especulaciones sobre el origen de este virus, las cuales todas apuntan a China como principal responsable de la expansión del Covid-19 por el mundo. Pero ¿Qué tan ciertas son todas estas teorías?
Las dos teorías más fuertes que se manejan son el escape del virus desde un laboratorio en Wuhan, China, con muchas personas afirmando incluso que el virus fue creado por el humano como arma biológica. La segunda teoría más compartida ha sido que el virus se transmitió al humano en un mercado de la ciudad de Wuhan, donde se comercializa la carne de murciélago para el consumo.
Estas teorías comenzaron principalmente producto del informe de la Alianza de Inteligencia de los cinco principales países de habla inglesa (Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda), llamada “Cinco Ojos”, realizado por el Servicio Secreto de Inteligencia Australiano (ASIS) y publicado por el diario “The Daily Telegraph”, en donde se hablaba de un peligroso virus originado en Wuhan, que se estaba esparciendo en el mundo y del que China ocultó información, perdiendo así tiempo valioso en su combate.
Pero tanto en el informe del ASIS como en las agencias de inteligencia de Estados Unidos, ha quedado establecido que el coronavirus no fue creado por el hombre ni tampoco modificado, no habiendo tampoco ninguna evidencia científica de ello. Así también, las mismas agencias de inteligencia, aún no logran establecer si efectivamente el virus se esparció producto de un accidente en un laboratorio o por la consumición de carne de murciélago.
El medio australiano “Saturday Telegraph” ha refutado también la teoría de que este era un proyecto secreto de China, relatando como Shi Zhengli, directora del Centro de Virología de Wuhan, trabaja desde hace 15 años en coronavirus procedentes de murciélagos y que en este proyecto colaboraron con el laboratorio de salud animal de la “Organización de Investigación Científica e Industrial de la Commonwealth CSIRO”, en Australia, y con la Universidad de Carolina del Norte, en Estados Unidos.
La investigación de Shi Zhengli pretendía aislar los virus en murciélagos e investigar su transmisibilidad a los humanos. En conjunto con la Universidad de Carolina del Norte, entregaron en 2015 la información de que los virus similares al SARS podrían saltar directamente de los murciélagos a los humanos y que aún no había tratamiento contra ellos, adicionalmente, en 2019 establecieron que los futuros brotes de coronavirus del tipo SARS y MERS procederán de murciélagos y que existe una gran probabilidad de que suceda en China.
Finalmente, las investigaciones sobre Coronavirus no eran secreto para las potencias mundiales ni la comunidad científica, así como tampoco sus efectos. La alta peligrosidad de estas investigaciones son el motivo más sensato por el cual este virus llegó a la población.