Las células madre parecieran ser las orquídeas del mundo de la terapia celular. Éstas son clave para nuevas terapias que se están expandiendo rápidamente tanto para enfermedades comunes como raras alrededor del mundo. Sin embargo, estas terapias llegan a un alto costo en tiempo, esfuerzo y riesgo.
Lo que hace a las células madre únicas para terapias de alto riesgo es la dificultad que requiere su manejo. Estas células tienen un mayor riesgo de contaminación, debido a su necesidad de manejo diario. También su mantenimiento tiene un costo monetario más alto, debido a los valores de sus medios de crecimiento y reactivos, los cuales tiene un valor diez veces mayor que los necesarios para células comunes. Su sensibilidad a las condiciones cambiantes, la misma característica que aumenta su valor como tratamiento, significa que el más mínimo estímulo puede traer diferenciaciones al final del proceso para esa población en específico.
La pérdida de una población de células madre puede traer un altísimo costo de tiempo y presupuesto para cualquier laboratorio. Una manera común de mantener y hacer crecer una población de células madre es segregándolas dentro de su propio espacio, aunque esto no siempre está dentro de las posibilidades de espacio físico y presupuesto de cada laboratorio, ya que requiere de una incubadora especializada.
Es por este motivo que una incubadora con compartimentos diferenciados es una nueva solución que se ha implementado en los laboratorios. Este diseño permite el manejo discreto de las muestras dentro de un mismo equipo. Sus cámaras pueden proteger cada población de células como si estuvieran en su propia incubadora.
Al momento de adquirir una nueva incubadora en el laboratorio, se deben considerar los siguientes aspectos:
– Reducir el riesgo de contaminación: El 87% de los laboratorios que trabaja cultivando células, sufre al menos un evento de contaminación al año. Trabajar con compartimientos separados ayuda a bloquear la transmisión de microorganismos, gracias a sus filtros de membrana.
– Estabilidad Medioambiental: La interrupción del crecimiento de la población de células que ocurre cada vez que se abre la puerta de incubadora no puede ser mirado en menos. La temperatura puede bajar al punto de igualar la del exterior del equipo en menos de 30 segundos. Al segregar las células en compartimentos separados, el resto puede mantener la estabilidad mientras uno solo es manipulado.
– Uso de Gas y Evaporación: Crear y mantener un ambiente hipóxico dentro de la incubadora requiere del uso de bastante nitrógeno. Un equipo con múltiples cámaras usa un 60% menos de nitrógeno y el espacio más pequeño de cada cámara reduce la evaporación en un 50%.