La esterilización es un proceso diseñado para destruir y remover cualquier forma de vida presente en un instrumento. Esto se puede lograr con métodos físicos o químicos. Por ejemplo, un Autoclave, esteriliza con vapor con alta presión y calor.
Otras técnicas para esterilizar con calor utilizan infrarrojo para matar los microorganismos en pocos segundos, utilizando temperaturas hasta los 815°C. Por el lado químico, el peróxido de hidrógeno es capaz de romper el tejido celular.
Este método también puede ser utilizado para eliminar agentes biológicos cuasi vivos, como virus o priones, lo que aún no se aclara por la comunidad científica si corresponden a seres vivos. No lograr eliminar estos elementos de los instrumentos y superficies, puede presentar serias ramificaciones para los pacientes y personal del laboratorio, por lo que es importante seleccionar la técnica de esterilización más apropiada.
Esterilizar versus desinfectar
La esterilización se distingue de la desinfección en el hecho de que mata, desactiva o elimina toda forma de vida o agentes biológicos. La desinfección se refiere en específico a la remoción de agentes biológicos dañinos. En términos prácticos, esterilizar se requiere en situaciones críticas para la salud, como hospitales, mientras que la desinfección es un proceso que una persona puede realizar en su hogar.
Métodos de esterilización física
Hay una gran variedad de técnicas para esterilizar superficies. Primero, el calor y presión pueden remover sustancias lábiles de los instrumentos y equipos. Los compuestos biológicos, como algunas proteínas y virus, presentan un reto al momento de esterilizar. Los priones por ejemplo, han demostrado resistencia a la desnaturalización por calor y presión, así como a muchas enzimas y químicos. La modificación covalente de estos compuestos es recomendada para su remoción.
La radiación por ionización, como los rayos X, también es un esterilizador eficiente, actuando para liberar electrones de las moléculas. Ya que muchos agentes transmisibles requieren ADN y ARN para su propagación, por lo que romper su columna vertebral nucleica, puede ser una forma de reducir su transmisión.
Esterilización química
El Óxido de etileno (EtO), es utilizado para esterilizar objetos que son sensibles a las altas temperaturas o radiación. Esto incluye los instrumentos de plástico o materiales, ópticos o electrónicos.
El Vapor de peróxido de hidrógeno es otro químico efectivo para remover agentes biológicos de las superficies de muebles, equipos y otras superficies difíciles de sanitizar. El vapor es capaz de penetrar en cualquier área para esterilizarla.