La Mufla es un horno que alcanza altas temperaturas, por lo que se utiliza principalmente para la cocción de cerámicos o fundición de metales. En el laboratorio, se aplica su uso para calcinar sustancias, secado de muestras, fundición y procesos de control de calidad, entre otros. Se compone de una cámara cerrada, hecha de material refractario, una puerta que contiene una pequeña ventana de observación mediante la cual se pueden introducir sondas para medir la temperatura. En la parte superior, tiene una abertura para la salida de los gases, su exterior está hecho de materiales térmicos y aislantes.
Estos son los principales tipos de Mufla existentes en el mercado:
1- Mufla de laboratorio: Se utiliza para un gran cantidad de procesos y es un equipo muy sensible a la temperatura con gran aislamiento térmico, lo que le permite mantener temperaturas constantes sin fugas ni propagación de calor. Alcanza una temperatura máxima de 1.100°C.
2- Mufla para templado: Está diseñada para realizar procesos de revenido y templado de metales mediante un control de temperatura eficiente que logra la temperatura deseada rápidamente con un mínimo sobrepaso de esta. Su temperatura máxima es de 1.200°C.
3- Mufla de atmósfera controlada: Es ideal para el trabajo con gases nobles o ambientes controlados por el intercambio de gases en su interior, lo que le permite simular condiciones de trabajo para controles de calidad. Su temperatura máxima es de 1.200°C.
4- Mufla de alta temperatura: Se utiliza para procesos en los que se quiera llevar las temperaturas al máximo, alcanzando los 1.700°C.
5- Mufla con control en rampas: Este equipo tiene mejor precisión de temperatura y una mayor tecnología en sus controles, con programas personalizables y control digital con rampas.6- Mufla de gas: Es un equipo con menor consumo energético, lo que también se traduce en una menor precisión de temperatura, con altas fluctuaciones de la misma. Está indicado para procesos de fundición simple.