Usar el agua correcta en un baño termorregulado es vital para evitar la formación de corrosión y de esta forma, darle al equipo una vida útil mayor. Adicionalmente, esto ayuda a mantener el baño limpio y confiable para el uso que se le quiera dar.
Agua desionizada
La mayoría de los baños termorregulados están hechos de acero inoxidable, por lo que para prevenir la corrosión de este material, se debe usar agua destilada o desionizada.
El agua de la llave contiene varios tipos de iones disueltos, los que pueden contribuir a la formación de picaduras y corrosión, mientras que el agua destilada o desionizada, se genera mediante un proceso en el que estos iones son removidos.
De todas formas, hay que asegurarse que el sistema utilizado para producir esta agua desionizada o destilada, no utilice un retrolavado de sal para regenerar cartuchos de intercambio iónico, ya que esto puede dejar rastros de iones de sodio en el agua, lo que es muy corrosivo para el acero inoxidable del baño termorregulado.
Mantener el agua oxigenada
El acero inoxidable utilizado en los baños termorregulados, tiene en su mayoría una capa de óxido de cromo para prevenir la corrosión. Si esta capa se daña, el oxígeno presente en el agua puede formar una nueva capa.
Debido a que el agua pierde su oxígeno disuelto con el tiempo, especialmente si se caliente o se deja quieta, ésta debe ser reemplazada de manera regular, para asegurar que esté siempre lo suficientemente oxigenada.
Seguir estos simples pasos ayudará a que el baño termorregulado esté siempre libre de corrosión.