Centrífuga: Cómo maximizar su rendimiento y vida útil

La centrífuga es una herramienta esencial en casi todos los laboratorios y su tecnología ha avanzado significativamente a lo largo de los años para brindar una mejor funcionalidad. Mantener la centrífuga funcionando a su máximo rendimiento durante su vida útil requiere un uso y cuidado adecuados a diario. Aquí hay algunas cosas que a tener en cuenta:

Comprobación del bloqueo del rotor

Se debe revisar diariamente el bloqueo del rotor para verificar que esté seguro y bloqueado correctamente. Antes, los rotores se colocaban manualmente en el eje de transmisión, se ajustaban con herramientas manuales y luego era necesario levantar el rotor para comprobar que estaba ajustado. Los diseños modernos para la mayoría de las centrífugas cuentan con un rotor de bloqueo automático que lo bloquea en su lugar cuando se configura. Se recomienda que se levante suavemente el rotor para asegurarse de que el bloqueo automático funcione correctamente.

Cargar la centrífuga con el equipo adecuado

La carga adecuada de la centrífuga también es crucial para asegurarse de que se obtiene el máximo rendimiento. La selección de las cubetas, el rotor y los insertos apropiados, así como el equilibrio de la carga dentro de la centrífuga, ayuda con esto. Si se está utilizando un rotor de cangilones oscilantes, coloque los cuatro cangilones, no solo la cantidad que se necesita en ese momento. Asegúrese de que las tapas estén trabadas en su lugar o bien selladas. La carga adecuada también incluiría asegurarse de que se está utilizando los adaptadores correctos con los tubos correctos. Si necesita girar tubos de 50 ml con bases redondas, necesitará un adaptador hecho para tubos de fondo redondo de 50 ml. El uso de un adaptador para tubos de forma cónica de 50 ml no tendrá el soporte adecuado y podría provocar la rotura del tubo, fugas de muestra o daños en la centrífuga. También debe verificar que los tubos que está utilizando están clasificados para la velocidad máxima (RPM) de la centrífuga. Los tubos clasificados para RPM más bajas no deben usarse en centrífugas que tengan una clasificación más alta. Siempre se debe consultar primero el manual que viene con la centrífuga sobre la altura correcta de llenado de los tubos y la forma correcta de cargar para que la centrífuga esté equilibrada.

Limpieza

La limpieza rutinaria de la centrífuga, así como asegurarse de que se realice el mantenimiento de rutina, es otra forma de optimizar su potencial de vida. El recipiente de la centrífuga y todos los accesorios utilizados deben desinfectarse periódicamente; se recomienda utilizar alcohol isopropílico al 70 %. No se recomienda que utilice ningún tipo de blanqueadores fuertes. Mientras limpia el tazón, también se recomienda que limpie el rotor, las cubetas y cualquier inserto. Es una buena práctica quitar el rotor al final del día y dejarlo secar. Después de la limpieza, se recomienda dejar que la centrífuga se seque por completo dejando la tapa abierta. También debe aplicar una pequeña cantidad de grasa a base de silicona a los muñones del rotor después de cada limpieza, esto permitirá que los cangilones oscilen correctamente sin causar fricción cuando estén en uso.

Inspección

Finalmente, la inspección regular de todas las piezas y sellos de la centrífuga en busca de signos de grietas y desgaste, junto con los demás elementos mencionados anteriormente, puede hacer que la centrífuga dure muchos años. Reemplazar las piezas que muestran signos de debilitamiento o grietas es imperativo para asegurarse de que las muestras se centrifuguen correctamente y sus resultados sean precisos.