La placa espiral es un método dos en uno que permite la dilución y el emplacado al mismo tiempo. Este es un método oficial de la APHA, la AOAC, y reconocido por la FDA BAM, cuyo principal beneficio es la increíble ganancia de tiempo y la reducción de los residuos de placas de Petri en comparación con los métodos tradicionales de siembra como placa extendida, placa vertida y placa de caída.
Este cultivo rápido consiste en inocular un volumen conocido de muestra líquida en la superficie de una placa de agar giratoria. El volumen de la muestra disminuye a medida que la jeringa se dispensa desde el centro hacia el borde de la placa giratoria describiendo una espiral de Arquímedes. De esta manera, una placa en espiral crea una dilución decimal triple en una sola placa.
La concentración microbiana está determinada por:
- Contar las colonias en una parte de la placa de Petri donde son fácilmente contables
- Dividiendo esta cuenta por el volumen apropiado.
La principal aplicación de la placa en espiral es la de realizar extensiones de superficie para la enumeración de microorganismos viables donde una sola extensión puede tener un rango de detección entre 25-250 CFU/placa de acuerdo con el Manual de análisis bacteriano de la FDA.
Esta aplicación se utiliza principalmente para evaluar las concentraciones bacterianas durante y después de la fabricación o el procesamiento de alimentos, bebidas, productos farmacéuticos y cosméticos. También se implementa ampliamente durante las pruebas de provocación (también conocidas como pruebas de eficacia de conservantes).
Este método también se ha aplicado para analizar muestras de agua ambiental. Las industrias agrícola y ambiental implementan placas en espiral en desafíos con biopesticidas, prevención de heladas y estudios de hojas.
La característica principal de estas placas es el uso de microjeringas desechables de alta precisión. Las microjeringas tienen una capacidad de 110 µL y entregan volúmenes extremadamente precisos de muestras a las superficies de agar. Al ser de un solo uso, las jeringas no requieren ser desinfectadas y por lo tanto no generan casos de falsos negativos o falsos positivos. La placa espiral no solo brinda una alta sensibilidad, sino que también es muy fácil de usar e intuitiva.
Una vez finalizada la incubación, el siguiente paso será el conteo de bacterias con el uso de una cuadrícula para facilitar la lectura. O, para aprovechar al máximo esta automatización, puedes optar por enumerar las colonias con un contador automático de colonias que te dará el resultado con la máxima precisión en sólo 2 segundos.