Los Baños Secos son un elemento de calor conectado a un bloque de metal mecanizado diseñado para sostener microplacas, tubos de ensayo, ampollas o viales en el laboratorio.
Estos Baños pueden ser digitales, utilizando un controlador montado en el frente de la unidad, que se encarga de definir los parámetros de temperatura y velocidad de agitación, además de las alertas necesarias para los operarios. Tanto los Baños Secos como los de agua, son utilizados para descongelar, calentar reactivos y ensayos microbiológicos realizados por los laboratorios clínicos e instituciones de investigación.
Cada bloque de metal utilizado en los Baños Secos, son manufacturados para sostener un estilo específico de tubo o microplaca. Estos son removibles y pueden ser rápidamente intercambiados para acomodarse a los protocolos de cada ensayo. El Baño Seco puede también incluir tapas para proteger las muestras de la exposición al ambiente o para prevenir la pérdida de calor. En el caso de los Baños fríos, también pueden incluir resistencias de enfriado para mantener las temperaturas bajo los -20°C.
Utilizar Baños Secos ofrece una serie de ventajas por sobre el Baño de agua o circuladores de inmersión. Debido a que el Baño Seco no contiene agua o fluidos, son más adecuados para proteger a las muestras de la contaminación cruzada. Los bloques pueden ser removidos y autoclavados para esterilizarlos por completo, siendo estos equipos ideales para áreas de investigación asépticas.
Debido a que los bloques están diseñados para sostener de manera segura tubos específicos, resultan óptimos para calentar contenedores abiertos, como los tubos de ensayo o placas de PCR. Adicionalmente, al estar directamente conectados al elemento de calor, estos Baños se pueden lograr la temperatura objetivo en 15 a 30 minutos, mientras que los Baños con agua requieren hasta de dos horas para lograrlo.
Los Baños Secos estándar pueden mantener una temperatura desde los 5°C por sobre la temperatura ambiente hasta los 100°C. Sin embargo, algunos bloques de calor especializados, pueden lograr temperaturas de hasta 130°C, destinados para derretir sustratos o la desnaturalización de enzimas.
Por otro lado, un Baño Seco refrigerado, puede enfriar las muestras hasta los -20°C para el almacenamiento temporal en frío o entibiar solventes con puntos de derretimiento bajos.