Un electrodo tradicional de vidrio es un instrumento muy delicado, que necesita cuidado constante para mantenerlo en buen funcionamiento. Si un electrodo se ha dañado por la exposición a químicos incompatibles, como proteínas, metales pesados o sulfuros, éste se puede limpiar y revivir utilizando soluciones especializadas de limpieza.
El electrodo de PH tiene una unión simple y es particularmente susceptible al daño y puede bloquearse y dejar de funcionar si toman contacto con muestras que contengan los químicos incompatibles anteriormente mencionados. A pesar de que idealmente se recomienda utilizar un electrodo especializado para cada tipo de muestra, también es posible limpiar y revivir un electrodo dañado con una solución de limpieza.
Contacto con proteínas
Si un electrodo se ha bloqueado por contaminación con proteínas, se debe remojar en una solución de Pepsina al 5% con Ácido clorhídrico en 0.1 mol/L por una hora.
Contacto con sulfuros
Cuando un electrodo tiene un electrolito que contiene iones de plata, estos pueden reaccionar con los sulfuros en las muestras, provocando un bloqueo en la unión, de sulfuro de plata. Para este tipo de bloqueo, una solución de tiourea se puede utilizar para remojar el electrodo hasta que la decoloración desaparezca.
Problemas de almacenamiento o mantención
Para electrodos que no han sido almacenados correctamente, en la solución correspondiente, o que se han rayado, una solución de regeneración puede extenderles la vida útil. Esta solución contiene ácido fluorhídrico, el que deshace la primera capa del vidrio, para exponer una nueva.
Esta solución es muy peligrosa, por lo que se debe tomar estrictas precauciones de seguridad al manipularla. Sólo se debe utilizar el mínimo volumen necesario y los operarios deben tener en todo momento sus elementos de protección personal. Sólo la punta del sensor debe tocar el líquido, ya que si esta solución toca el eje central, se producirá corrosión.