Agitador de tamiz: Cómo elegir el más adecuado

Utilizando un tamiz se puede clasificar y separar el material granulado presente en una muestra, además de determinar la distribución del tamaño de las partículas que deben tener ciertos materiales. El agitador de tamiz automatiza y estandariza esta técnica que se ha realizado por siglos de manera manual.

El tamiz manual aún es utilizado en ciertas circunstancias en el laboratorio, pero para lograr un resultado más eficiente en tiempo y exactitud de resultados, la mejor opción es un agitador de tamiz, el cual crea suficiente energía como para agitar partículas a través de una serie de distintos tamaños de tamiz, para lograr el resultado específico deseado.

Elegir el agitador de tamiz adecuado es esencial, ya que las partículas reaccionan de manera diferente a las variadas acciones mecánicas. Adicional a esto, se deben considerar otros factores, como la aglomeración, la atracción estática, el volumen de muestra deseado, el nivel de ruido durante la operación y la degradación.

Frente a todas estas interrogantes, ¿Cómo elegir el agitador de tamiz adecuado para las necesidades de mi laboratorio? Existen tres tipos de agitador de tamiz para estos fines:

1- Tamiz mecánico: Estos equipos tienen mecanismos que agitan y reorientan las partículas de la muestra con movimientos orbitales, circulares o rotacionales. Algunos modelos también utilizan el golpeteo repetitivo de la pila del tamiz para reorientar más lejos las partículas. 

Este tamiz está recomendado cuando se necesita una separación más aguda de los materiales de 2 pulgadas (50mm). El ruido que emiten estos equipos puede afectar el trabajo en el laboratorio, aunque algunos modelos poseen armarios insonorizantes con tecnología de reducción de sonido.

2- Tamiz vibratorio: Este agitador trabaja con energía electromagnética silenciosa para agitar las partículas. Su ajuste de la vibración crea un lecho fluido y móvil del material de la muestra, distribuyendo uniformemente el material a través de la malla mientras levanta y reorienta las partículas para asegurar el número máximo de oportunidades de paso.

Este equipo está recomendado para procesar materiales entre 25mm y 20 μm, como productos farmacéuticos, polvos secos, cosméticos y alimentos.

3-  Tamiz sónico: Utilizando 3.600 pulsos de energía sonora por minuto de un generador de audio, creando una columna de aire oscilante encerrado por la pila de tamiz, estos equipos generan una agitación continua que excita las partículas y las reorienta continuamente a las superficies de la malla. 

El tamiz sónico aplica para usos en los que el tamaño de la partícula es tan fino como 3 μm, siendo efectivos para polvos, materiales granulares finos y materiales “problemáticos”.